Desde hace años he manifestado lo poco favorecedoras que me parecen las botas UGG pero este año he caído en la tentación.
No se debe a que ahora me parezcan un calzado precioso ni que ya reniegue de los taconazos pero desde que nació Claudia también busco la comodidad y no nos engañemos, no hay nada más cómodo y calentito para salir a dar largos paseos con el carrito o recorrerte la ciudad haciendo mil recados a contrareloj.
Espero que esto no signifique que en unos años me veáis con "ugly shoes", aunque nunca se sabe...
Besos: Blair
botas: UGG (vía Spartoo)